Solo eran dos metros lo que nos separaba pero sabia que algo no andaba del todo bien,su cuerpo apenas se movía cada cinco minutos y en intermedios convulsionaba de forma obsesiva . Me encontraba en pánico,tanto que me aferre a mis piernas abrazándolas y cerrando mis ojos por el temor. Cuando menos lo esperaba una cálida brisa me atrapo y por alguna razón desconocida no sentí el temor ,me levante con arrebato preparada para dejar el arma y tan solo correr fuera de ese sótano. 

Que locura aquella,me había olvidado que estaba bañada en un litro y medio de pura sangre de pies a cabeza; trastornada caí al suelo aferrándome al arma homicida gritando su nombre hasta desgarrar mi propia voz. 

No había nadie que me apartara,ni que me escuchara o llegara a verme ,de cierta manera extraña estaba a salvo de la mirada del hombre y sus crueles palabras;pues ellos me jusgarian a mi y me llamarian psicopata pero no saben porque lo hice ,para mi era mas que le necesidad de matar era también el deseo vivo en carne y espíritu.

Creo haberme mecido en mi mismo lugar por mas de dos horas y media,cuando pude tomar la decisión de retirarme del lugar golpee a ese cuerpo inmundo ;ya no era la pasión de sentir la sangre correr lo que me motivaba era el hecho de mostrar una sonrisa después de que me conciencia me carcomiera por horas enteras.

Presentía el temor de cerrar los ojos,verte en sueños idealizada por la idea de volver a matarte aunque solo fuera una ilusión de mi mente atormentada. Cuando el reflejo se presentaba,sonrei por las ansias de volver a morir como alguna vez lo hice en aquellos brazos que ahora yacen muertos al final de esta casa..

Cientos de veces era yo la que despertaba de esa pesadilla y quien se veía atada por el era yo,la que derramaba las lagrimas y era acorralada en su momento solo era yo. Entonces me di cuenta de que todo aquello era un sueño,jamas le había hecho daño pero lo deseaba con todo este corazón que desangraba lentamente en el suelo.